Situada en el sureste de la cuenca de México,
estaba rodeada por los antiguos lagos de Xochimilco, Chalco y Texcoco, formando parte integral
de la cuenca lacustre de la región. Este entorno favorecía la agricultura intensiva,
especialmente la chinampería, que permitió a los pueblos xochimilcas y chalcas prosperar.
Además, la sierra funcionaba como un importante corredor natural que conectaba a los pueblos del
poniente y norte, con los del oriente, hacia Chalco y Texcoco. A través de la sierra se
establecieron rutas comerciales y de intercambio que permitieron el tránsito de productos
agrícolas, textiles y otros bienes entre estas zonas. Este vínculo facilitó no solo el comercio,
sino también la interacción cultural entre las diferentes comunidades de la cuenca. La presencia
de estos caminos convirtió a la Sierra de Santa Catarina en una pieza clave dentro de la
estructura económica y social prehispánica.
Altepetl Cuitlahuac
Vista aérea del altepetl Cuitlahuac durante el Posclásico tardío. Esta isla
en medio de los dos grandes lagos de Chalco y Xochimilco fue fundada por cinco personajes de
origen chichimeca en el año 1222. El centro de la isla básicamente fungió como un centro
ceremonial en donde se localizaban los templos dedicados a sus deidades, las casas de la gente
de gobierno y de los sacerdotes y militares, en tanto que los macehuales o campesinos vivían en
sus chinampas y terrazas agrícolas. En la imagen se puede observar la tzacualli o adoratorio
principal en honor a Mixcoatl, dios tutelar de los cuitlahuacah, cerca de ahí estuvieron también
el tlachco o juego de pelota, el calmecac o casa de estudios superiores, los cuatro tecpan o
residencias de gobierno y los templos menores dedicados a deidades acuáticas y chinamperas como
Amimitl, Atlahuah o Quilaztli. La isla era atravesada por la llamada calzada-dique de Cuitlahuac
que conectaba con tierra firme hacia las estribaciones de la Sierra de Santa Catarina y del
cerro Teuctli, la cual fue construida en la época de gobierno de Motecuhzoma Ilhuicamina,
probablemente en el año de 1449. Las cuatro cabeceras de gobierno que existían en este altepetl
estaban orientadas de la siguiente manera: Ticic al sureste, Tecpan al suroeste, Teopancalcan al
noreste y Atenchicalcan al Noroeste. A la llegada de los españoles la isla concentraba a una
población de 2,000 habitantes. —Baruc Martínez Díaz
Huizachtepetl
El Cerro de la Estrella, en Itztapalapan, en los últimos años del México
Prehispánico se conocía con el nombre de Huizachtépetl, el Cerro del Huizache, y fue,
junto con su entorno ecológico y geomorfológico, el crisol del que surgió el poderoso
Imperio Culhua-Mexica, motivo de orgullo para México y el mundo entero. En su cima
principal se encuentra el Conjunto Arquitectónico del Templo del Fuego Nuevo (CATFN),
que en tiempos prehispánicos fuera el punto nodal de uno de los rituales cosmogónicos
y teogónicos de la mayor trascendencia que se celebraba cada 52 años: el encendido del
Fuego Nuevo, que marcaba el fin y el inicio de los ciclos de vida de nuestros ancestros,
y que de igual modo, tenía resonancia en toda la Mesoamérica prehispánica.
El Huizachtépetl no es un cerro común y corriente, al que se ha convertido desde
hace varios trienios en campo libre a los asentamientos irregulares. El Huizachtépetl,
es, desde hace por lo menos dos mil años, una MONTAÑA SAGRADA.
El lugar de nuestros ancestros, es Culhuacan, ahí, al pie del Huizachtépetl
--Jesús Evaristo Sànchez
Mexicaltzingo
Fundado antes de la llegada de los españoles, debe su nombre
náhuatl a su estrecha conexión con los mexicas, "el lugar de las casas de los mexicas". Aunque
previo a su dominio ya había sido habitado por otros grupos indígenas, su historia más conocida
está vinculada con Tenochtitlan. Mexicaltzingo, situado a orillas del Lago de Texcoco,
desempeñaba un papel crucial en la economía agrícola mediante el cultivo en chinampas, un
avanzado sistema de producción en parcelas flotantes. Al integrarse al imperio mexica, formó
parte de su red tributaria, proporcionando productos agrícolas como maíz y frijoles a la gran
metrópoli. Organizado políticamente como un altépetl subordinado a Tenochtitlan, Mexicaltzingo
contaba con una estructura social compuesta por campesinos, guerreros y sacerdotes. Además, su
vida religiosa se centraba en deidades relacionadas con la fertilidad y el agua, como Tláloc y
Chalchiuhtlicue, esenciales para su prosperidad agrícola.